Hoy una amiga y yo nos aventuramos a Kensington Market en busca de chilorio, ella ya había encontrado una tienda donde vendían ciertos productos mexicano, y yo solo pase por otra donde anunciaban comida y productos de latinoamerica. LLegamos a la segunda y en efecto estaba repleta de marcas familiares. Ella como toda buena escéptica que es dudaba encontrar chilorio, pero yo (también escéptica pero con hartas ganas de comer chilorio) no lo dude y después de darle dos vueltas a la tiendita que lo encontramos (de soya pero igual funciona). El viejito que atendía después de interrogarnos acerca de nuestra procedencia le pregunto que si de donde es él... "de la luna" me dice sonriendo.
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1 comentario:
qué respuesta tan buena!
Luego se quitó la careta de humano?? jajaja
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